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Con el globo montado y listo para el hinchado se enciende un ventilador que produce un flujo de aire orientado al interior de la vela. La parte inferior de la vela es una abertura, o boca, a través de la cual se llena el globo y se calienta el aire durante el vuelo. Basta abrir esa abertura para que el aire generado por el ventilador vaya llenado el globo, dándole forma. En unos pocos minutos la envoltura está llena de aire y el globo se hincha, todavía tumbado en el suelo. Ese momento es cuando el piloto aprovecha para realizar un chequeo del interior de la vela verificando que todo funciona correctamente y se encuentra en perfecto estado.

Gracias a Noelia por la imagen.

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