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Como todas las aeronaves los globos aerostáticos requieren de un continuo mantenimiento, necesario para que éstos cumplan con la normativa vigente y con las exigentes medidas de seguridad que se les aplican. Anualmente los globos pasan una revisión que se podría considerar el equivalente a una ITV que les proporciona el Certificado de Aeronavegabilidad, es decir un documento expedido por una empresa de mantenimiento autorizada que prueba que cumple con los criterios de seguridad exigidos. Pero eso son solo una parte de las revisiones, además de las que realiza el piloto antes de cada vuelo, cada parte del equipo debe ser inspeccionada y revisada a conciencia, y en caso de no estar en las condiciones requeridas debe ser reparada. Parte del mantenimiento lo pueden hacer los propios pilotos y operadores mientras que otras deben efectuarse en talleres autorizados.

La vela del globo sufre durante el transcurso de las operaciones pequeñas roturas que deben ser reparadas. Los quemadores dnecesitan una limpiexa en profundidad de vez en cuando. Las barquillas también precisan limpiezas y pequeñas reparaciones. Las botellas, donde se almacena el propano, tienen además revisiones periódicas al margen de la revisión anual, donde una vez más se someten a diferentes pruebas y test que deben superar. Alguno de los componentes de cada parte del equipo deben sustituirse cada varios años de uso o si no estuviesen funcionando como deben.

Todo ello, todo ese trabajo continuo de los operadores, hace que volar en globo sea una actividad muy segura y que nuestros pasajeros se encuentren en las mejores manos para disfrutar de su experiencia de vuelo.

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