Globos aerostáticos y paracaídas: ¿Los pasajeros llevan uno?
Globos aerostáticos y paracaídas: ¿Los pasajeros llevan uno? Otra de esas preguntas muy frecuentes entre nuestros pasajeros. Los pasajeros de un globo no llevan paracaídas como tampoco lo llevan los de un avión comercial. Sin embargo en el globo la explicación responde a un hecho curioso que seguramente no conocías: ¡El globo ya funciona como un paracaídas!
Un paracaídas es un velamen elaborado con tela de nylon o seda. Al igual que los globos que se elaboran de telas de nylon. En la fabricación de ambos se están utilizando telas más resistentes, menos porosas y de vida más prolongada. Estas telas cada vez más técnicas responden a mejoras en la seguridad.
Hay dos tipos básicos de paracaídas, los redondos y los rectangulares. Actualmente los rectangulares son los más comunes ya que permiten maniobrar durante el descenso, resultando así más seguros y precisos.
El descenso en caída libre entre 200 y 300 km./h. se frena mediante el uso del paracaídas hasta pasar a unos 18 kilómetros por hora, o lo que es lo mismo, unos 5 metros por segundo. Pero hablando de globos…¿qué pasaría si el piloto de un globo no usa el quemador y deja que este baje sin frenarlo?
Globos aerostáticos y paracaídas
Habitualmente el piloto de un globo de aire caliente controla el descenso mediante el uso del quemador. Así se elige la velocidad de descenso, calentando el aire que contiene el globo. Es por ese motivo que en ocasiones veréis al piloto accionando el quemador aún cuando el globo está bajando. Si se permitiese bajar el globo sin frenarlo es cuando descubriríamos que actúa como un paracaídas. De hecho de forma tan similar que la velocidad máxima de descenso sería de unos 5 metros por segundo. La misma que la de un paracaidista.
¿Por qué sucede esto? La física que actúa en ese caso es la misma. La velocidad de descenso se reduce hasta alcanzar una velocidad límite constante. Esta velocidad límite se obtiene cuando el peso—que ejerce una fuerza hacia abajo—, es igual a la fuerza de rozamiento— que ejerce una fuerza en sentido contrario—, hasta que la aceleración es igual a cero. O lo que es lo mismo, el descenso continúa pero se estabiliza.
Globos aerostáticos y paracaídas
Descenso en frío
Durante los entrenamientos de aprendizaje los pilotos realizan una maniobra que se conoce como descenso en frío. Consiste exactamente en dejar descender al globo sin utilizar el quemador, es decir, sin calentar el aire que contiene la vela. Así se puede observar como el globo inicia un descenso que se va acelerando. Nuestros instrumentos miden ese descenso en metros por segundo. Llegando a la velocidad límite de descenso alrededor de cinco metros por segundo el globo se estabiliza y no acelerará más. A partir de ese momento, mientras el piloto no haga nada por modificar esa bajada, el globo continuará su descenso a la misma velocidad que un paracaídas redondo.
Los pasajeros de un globo no llevan paracaídas porque no lo necesitan, ya tienen uno común para todos los que van a bordo.
¿Quieres saber más sobre la relación entre los globos de aire caliente y los paracaídas?
¿Listo para volar?
¡Reserva Ahora!