Los globos aerostáticos y la ciencia
Los globos aerostáticos y la ciencia han estado relacionados desde los primeros vuelos a finales del d.XXVIII. Desde los primeros momentos de existencia los globos aerostáticos se revelaron como un medio extraordinario para nuevos experimentos científicos. Así, gracias a un globo, se descubrieron los rayos cósmicos y con ese descubrimiento, Víctor Hess, obtuvo un premio Nobel.
Los primeros experimentos para determinar las causas de la ionización del aire, realizados por Theodor Wulf, arrojaron un resultado muy interesante. En la parte superior de la Torre Eiffel la radiación ionizante era superior que en su base. Otros experimentos parecían confirmar el mismo resultado. Fue entonces cuando Víctor Hess decidió subir en un globo con tres electrómetros hasta una altitud de 5.300 metros. Así comprobó que la tasa de ionización se multiplicaba por cuatro respecto a las medidas a nivel del suelo.
Los globos aerostáticos y la ciencia
Con sucesivas ascensiones en globo Hess descartó al sol como responsable, gracias a una ascensión durante un eclipse de sol.
Así concluyó que la radiación no procedía de elementos radioactivos de la tierra y tampoco del sol. Debía proceder desde arriba y estaba claro que poseía mucha energía. Acababa de descubrir los rayos cósmicos y gracias a ello recibiría Premio Nobel 1936.
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