La distancia que recorre el globo durante el vuelo depende enteramente de la dirección y velocidad del viento. Ambos factores varían en función de la altura por lo que aunque varios globos despegasen desde el mismo punto a la vez y aterrizasen en el mismo momento los cambios de altura a lo largo del vuelo llevarán a cada globo a un lugar diferente. Lo habitual en los vuelos de pasajeros, que duran aproximadamente 1 hora, es recorrer entre 5 y 10 kilómetros, pero cada vuelo es diferente y siempre una aventura.