Momento precioso
El corzo ramoneaba en el campo de cereal segado los tallos cortos de la anterior siembra. Era una mañana fría y su aliento formaba nubes de vapor de agua frente a su hocico húmedo. El cielo estaba claro, sin una sola nube, de un azul brillante. Un rugido procedente del cielo le hizo levantar la vista. Un globo aerostático interpuso su enorme figura ante el sol, y su sombra puso en eclipse al corzo por unos segundos. De los globos jamás había tenido que escapar pero no se fiaba de los humanos, así que con un ágil salto cruzó el camino y se alejó brincando bajo los álamos de la ribera del Eresma.
Ready to fly?
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